Una de las cosas que más me gustan de Londres es la cantidad de parques y zonas verdes que tiene. Hyde Park, Regent´s Park, Greenwich Park, St James’s Park, Hampstead Heath… son probablemente los más conocidos. Pero Londres tiene una joya poco conocida para el gran público, Richmond Park.
El Parque Richmond cubre 955 hectáreas, lo que le hace el más grande de los Parques Reales de Londres y el parque urbano más grande de Europa. Se encuentra en el distrito de Richmond cerca de los barrios de Ham, Kingston upon Thames, Wimbledon, Roehampton and East Sheen. Quizá lo más increíble de Richmond es la sensación de estar en plena naturaleza dentro de la ciudad.
El parque es una reserva nacional natural, sitio de especial interés científico, área de especial conservación y en uno de los lugares internacionales más importantes para la conservación de la vida salvaje.
Originalmente creado para la caza de ciervos, Richmond Park tiene ahora más de 600 ciervos rojos (o ciervo común) y de gamo común, que vagan libremente en gran parte del parque.
Richmond también es un importante refugio para otras especies silvestres, incluyendo pájaros carpinteros, ardillas, conejos, serpientes, ranas, sapos, escarabajos ciervo y muchos otros insectos, además de numerosos árboles centenarios y variedades de hongos. Es particularmente notable por sus raros escarabajos.
El parque incluye numerosos edificios de interés histórico o arquitectónico. Uno de los más famosos es White Lodge, antaño una residencia de la realeza y ahora el hogar de la Royal Ballet School.
También son clasificados como edificios protegidos la muralla que lo rodea, Pembroke Lodge (la casa del Primer Ministro Lord John Russell), Holly Lodge, White Ash Lodge y Oak Lodge, entre otros.
¿Qué es una vista protegida? Son zonas desde las que pueden verse lugares específicos o edificios históricos, evitando que la vegetación oculte esa vista. También se pueden ver el London Eye y The Gherkin.
Entre 1819 y 1835 se crearon nuevas plantaciones y recintos cerrados, como Sidmouth Wood y la famosa Isabella Plantation, las dos valladas para mantener a los ciervos fuera.
Isabella Plantation es una atracción en sí misma, gracias a sus azaleas y camelias de hoja perenne, que han sido plantadas junto a sus estanques y arroyos. También hay muchos árboles y arbustos raros y poco comunes.
Se pueden practicar varios deportes en el parque, entre ellos ciclismo, pudiendo alquilar bicicletas cerca de Roehampton Gate, en las épocas de mayor afluencia cerca de Pembroke Lodge o en Richmond a la salida de la estación de tren.
Los precios no son especialmente baratos, así que casi es mejor que lleves la tuya o que cojas una Santander Cycle. El Tamsin Trail es un circuito del parque para ciclistas y peatones, mayoritariamente libre de coches.
Se puede pescar, pero sólo bajo permiso, en Pen Ponds, de mitad de junio a mitad de marzo. También puedes montar a caballo, gracias a los establos cerca del parque, como Barnfield Riding School, Riding in London o Wimbledon Village Stables.
El parque es muy popular también para las familias. Hay 2 parques infantiles Kingston Gate Playground y Petersham Gate Playground. Además, es habitual ver a familias haciendo un picnic o practicando también deportes.
¿Cómo llegar? En metro (District line hasta Richmond), overground, tren o en bus, habiendo varias líneas que paran en las puertas del parque. |