Si te gusta la cerveza, estás de enhorabuena. Reino Unido es un país ideal para disfrutarla. No sólo por la cantidad de marcas que podrás encontrar tanto en pubs como en supermercados, sino también porque podrás saborear las diferentes variedades de ésta.
La más común para nosotros es la larger, una rubia de toda la vida. Carling es la marca británica más famosa de este tipo, aunque también se puede mencionar Discovery. Además puedes encontrar cervezas internacionales como Carlsberg, Foster o las españolas San Miguel y Estrella.
La siguiente en cuanto a popularidad sería la stout o dark ale, lo que para nosotros es una negra. London Porter, Bass o Brains Dark son algunos ejemplos británicos, aunque la reina indiscutible sigue siendo la irlandesa Guinness.
Según su cuerpo e intensidad de sabor, podemos diferenciar entre mild, que significa suave o ligero en inglés, y bitter, amargo en inglés. Las primeras, como su nombre dice, son ligeras de cuerpo y suaves. Fueron muy populares en el pasado, siendo hoy en día menos comunes, lo que provoca que sea difícil encontrarlas embotelladas y que se sirven casi exclusivamente de barril. Como ejemplos la Bank’s Mild o Theakston’s Traditional Mild.
Las bitter son más amargas que las mild por las propiedades amargas del lúpulo. Suelen tener un color más pálido que las mild y un carácter seco. Existen varias gamas de bitters: ordinary o basic, a la de menor densidad; special o best bitter, de intensidad intermedia; y extra special, la de mayor. Probablemente sea el tipo de cerveza más común en la actualidad en Reino Unido. Por nombrar algunas, Chiswick, Burton, Marston’s, John Smith’s o Theakston Best Bitter.
Si hacemos una diferenciación por color, tenemos Pale Ale, Brown Ale y Old Ale. Antes de la Revolución Industrial, la mayoría de las cervezas eran oscuras en Reino Unido. Por ello, cuando se introdujo un estilo de cerveza más pálido, se le llamó Pale ale. Este tipo de cervezas son especialmente típicas en el centro y norte de Inglaterra, y suelen ser parecidas a las bitter, aunque son menos amargas y un poco más densas.
La Brown Ale es una especialidad de los condados de Yorkshire y Durham en el nordeste de Inglaterra, de color castaño o marrón. En general son fuertes, con buen sabor a malta y secas. Por último las Old Ale suelen tener un color oscuro, mucho cuerpo y a veces son un poco dulces.
Si diferenciamos por naciones, las cervezas escocesas normalmente son más fuertes que las inglesas debido a que están hechas con maltas escocesas. También suelen tener un color tostado o marrón oscuro, son menos amargas, tienen más cuerpo y son más adulzadas. Las ale irlandesas se caracterizan por su color rojizo y ser afrutadas. Aunque, sin duda alguna, la reina en Irlanda es la stout.
Olvídate de la caña ¡y pásate a la pinta!